EL RELOJ DE LA TORRE
Las campanas de la torre
escucho en la lejanía
con su sonido melódico
anuncia un nuevo día.
Su sonido me recuerda
otros tiempos ya pasados
pues el reloj de la torre
a todos nos ha llamado.
Día a día, hora a hora,
al pueblo va recordando
que el tiempo es igual que el oro
y debemos valorarlo.
Y por la noche se calla
respetando así el descanso
de todos los habitantes
que volvieron del trabajo.
A mí también me gustaba
el sonar de las campanas
de la torre de mi pueblo
que a la oración nos llamaba.
Y cuando alguien moría
su lamento le mandaba
y si se casaba alguien
con alegría tocaban.
Ahora solo las tocan
para misa y muy bajito
porque dicen que molesta
su largo y dulce sonido.
Como han cambiado las cosas
Lo que tanto me gustaba
parece que a los de ahora
les parece una chorrada.
Pero yo sigo soñando
con el tañer de campanas
que escuchaba cuando niña
y el alma me serenaban.
3 comentarios:
Me gusta muchísimo oir las campanas. Cuando voy al pueblo las oigo, incluso el reloj de la torre también por la noche.
Ojalá esa costumbre no la quiten nunca.
Besicos
Gracias mi fiel lectora...¡¡Tu como siempre, la primera en leerme!!
Nos gusta tanto su poesía sobre las campanas que la hemos colgado también en nuestra página Web, http://www.campaners.com/php/textos.php?text=5139 especializada en campanas, campaneros y toques.
Nos gustaría saber cual es la torre de la fotografía.
Gracias, y gracias también por la poesía compartida.
Saludos
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